Mi forma de ver la vida afecta también a otros

Conexión Interior-Ps. Francisco Carmona - A podcast by Francisco Carmona Romero

En el momento que reconocemos que todos provenimos de la misma Fuente también nos vemos abocados a reconocer que todos estamos unidos los unos a los otros. No estamos aislados y tampoco solos. Hacemos parte de un Universo que tiene sus propias leyes. Todos somos regidos, aunque nos cueste reconocerlo, por la misma Ley y la Fuerza que ordena el Universo también nos rige a nosotros.  De ahí que, no podamos pretender que nuestra forma de pensar, de actuar y de vivir nos afecte solo a nosotros. Todos nos vemos, de una u otra forma, involucrados. La forma particular de ver el mundo también afecta a los que están a nuestro alrededor. Cuando se emprende una acción buscando solo el beneficio propio, alrededor hay una serie de personas que se ven afectadas. Es imposible desconocer las repercusiones que nuestras acciones justas o injustas tienen en los que nos rodean y también en aquellos que no vemos pero que, de alguna forma u otra, se ven afectados. Es decir, nuestro comportamiento afecta directa o indirectamente a otras personas. La decisión de uno solo puede salvar o condenar a muchos. A diario, lo podemos apreciar en las noticias. Las mentes pueden estar unidas a la Fuente de dos formas. La primera, por el deseo de colaborar con la voluntad divina. La segunda, por oposición a esa voluntad que entraña la percepción y creencia de que lo que proviene de ella es una amenaza para la autonomía y libertad personal. Sucede algo semejante a las reacciones que los hijos pueden tiene frente a los mandatos de sus padres, para unos son una bendición y, para otros, en cambio, son inaceptables. Sin embargo, hay que tener siempre presente que la intención de la Fuente siempre es buena y busca nuestro bienestar y plenitud. No es lo mismo una mente abierta al amor que una orientada hacia la venganza. La mente que se orienta hacia el amor entra en resonancia con las obras que provienen de él. En cambio, la mente que se orienta hacia la venganza entra en resonancia con las obras que ésta propone. Nosotros actuamos según la fuerza hacia la que orientamos nuestra vida y el propósito de nuestra existencia. Aunque todos los seres humanos somos iguales, nos diferenciamos en la orientación que damos a nuestro corazón, a nuestro pensar y actuar. Inevitablemente nos vemos dirigidos por la fuerza hacia la que estamos orientados. En la forma como vemos las cosas está implicada nuestra historia personal y la lectura que hacemos de ella. Si estamos conectados con el dolor y el sufrimiento nuestra percepción será coherente con el dolor y el sufrimiento. Si la lectura la hacemos irresponsablemente entonces, terminaremos que los demás están obligados a experimentar el dolor y sufrimiento que hemos experimentado anteriormente. En cambio, si nos conectamos con el amor entonces, comprenderemos que el dolor y el sufrimiento que hayamos podido experimentar termina con nosotros y los demás merecen cosas diferentes porque el dolor y sufrimiento terminan con nosotros.

Visit the podcast's native language site